Estamos
ya acostumbrados a que traten de denigrar a funcionarios y trabajadores del
sector publico en general. Lo normal es que el ataque venga de dentro, político
o ministro de turno que, sin medir las consecuencias de lo que dice y pensando
sólo en la posibilidad de ganar unos cuantos votos con unas declaraciones
populistas, no duda en arremeter contra todos los empleados públicos utilizando
calumnias y medias verdades. A la actuación de estos imbéciles ya estamos
acostumbrados, pero la pasada semana se ha dado otra vuelta de tuerca al tema y
ha sido nada más y nada menos que Juan Rosell, presidente de la Patronal (CEOE),
quien, entre otras lindezas, se ha permitido afirmar que “saldría más barato para el país mantener a algunos funcionarios en sus
casas cobrando subsidios que en sus puestos de trabajo”. Semejante afirmación
se la permite hacer un individuo que tiene como número dos de la organización
que preside a Arturo Fernández. Sí sí, el tipejo de “en España se acabó el café
para todos”, ese empresario de hostelería, que presume de ser amigo de
Esperanza Aguirre y que gestiona, entre infinidad de negocios, la cafetería de la Asamblea de Madrid, lugar donde un diputado paga por comer 3,55 € (el coste real, lógicamente, lo pagamos todos
los contribuyentes).
En
fin, al señor Juan Rosell, antes de soltar algún despropósito como el que dejó
caer el viernes pasado, más le valdría fijarse en quién tiene a su derecha, por
nuestra parte, además de recordarle aquello de “dime con quién andas y te diré
quién eres” le dejamos aquí, a modo de respuesta, un par de artículos que aparecen
en la web de CCOO:
Saludos y hasta la próxima entrada.
José Rafael Lluch Pozo
SECCIÓN SINDICAL DE CCOO DEL AYUNTAMIENTO DE ALFAFAR